Rendimiento semanal al 7 de enero de 2022:
S&P 500: -1,89%
Nasdaq: -4,64%
Dow Jones: -0,29%
El año inició en un entorno volátil, en favor de la visión de un 2022 turbulento para los mercados financieros. El primer movimiento importante se presentó el lunes, cuando los inversionistas, retornando de las festividades, vendieron bonos del tesoro americano y presionaron sus tasas al alza, con las notas a 10 años incrementándose desde 1.49% a 1.6%.
Posiblemente, hubo una apuesta sobre un panorama económico más favorable, dados los menores temores sobre la variante Omicrón, y un ajuste hacia el escenario probable de alzas en la tasa de interés de política monetaria. La salida en activos seguros dio espacio para un avance ligero en las acciones, que fue notoria para Tesla (que publicó números récord de entregas de vehículos en el últimos trimestre del 2021), y Apple, que tuvo un rally hacia los US $182 que llevó a la compañía a la marca histórica de los US $3 billones de capitalización bursátil. Ese día el Nasdaq avanzó 1,19%, aunque luego las acciones tecnológicas cedieron debido a un reposicionamiento hacia acciones más sensibles al desempeño económico.
El evento principal en los mercados llegó el miércoles, cuando la Reserva Federal (Fed) publicó las minutas de su reunión de diciembre, en la que los oficiales acordaron una ruta más rápida para la reducción de las compras de activos y en la que señalaron tres aumentos de tasas a lo largo del año. El documento sorprendió a los mercados porque reveló una aproximación más decisiva de la Fed para contener la inflación: se sugirió que los incrementos de la tasa serían más pronto de lo esperado, y que se tomaría un paso más no solo culminando la compra de activos, sino reduciendo la hoja de balance.
Las noticias hicieron que los inversionistas actualizaran sus pronósticos a un aumento de tipos de interés en marzo, lo que presionó más al alza las tasas de corto y largo plazo. Como en otros episodios, la expectativa de política monetaria menos expansiva afectó a las acciones, especialmente aquellas en el cuadrante de tecnología – crecimiento (el Nasdaq cayó 3.4% durante la sesión). Al final de la semana las acciones siguieron retrocediendo, mientras que las tasas del tesoro americano a lo largo de la curva siguieron su tendencia al alza, producto de datos del mercado laboral en EE.UU que mostraron que la tasa de desempleo descendió a 3,9% (un número acorde con el cambio de orientación de la política monetaria).
Esta semana los inversionistas seguirán atentos a la política monetaria, en anticipación a la reunión del Fed a finales de mes. El martes, los presidentes del Banco Central Europeo y de la Reserva Federal tendrán pronunciamientos. Entre tanto, el miércoles y el jueves se conocerán los datos de inflación y precios al productos, respectivamente, para EE.UU en diciembre, lo que le dará al mercado indicios adicionales sobre las causas del incremento de precios y si estas deberían ceder en los siguientes meses, y de esta forma dar una señal más clara sobre la fuerza de la respuesta de la política monetaria para contener las presiones inflacionarias.